El corazón es péndulo que advierte, golpe tras golpe, en una misma herida, ¡cuán próxima a la muerte anda la vida! ¡Cuán cerca de la vida está la muerte!
Las empuja el dolor hasta la inerte tumba, que en nuestra senda está escondida, ¡a tan serena sombra, que convida a redimir muriendo nuestra suerte!...
Mas el dolor no mata en un instante, como la fiera daga; y la asemeja porque se clava con seguro tino:
Y así en el seno, el péndulo oscilante, golpe tras golpe advierte al que se queja que va la vida andando su camino.
El corazón es péndulo que advierte, golpe tras golpe, en una misma herida, ¡cuán próxima a la muerte anda la vida! ¡Cuán cerca de la vida está la muerte!