El político, de Baltasar Gracián - Editorial Almuzara

Baltasar Gracián y Morales (Belmonte de Gracián, 1601-Tarazona, 1658) es una de las cumbres literarias de la literatura clásica española que ha gozado de mayor fama allende nuestras fronteras, sobre todo a partir de la admiración que le profesaron Schopenhauer y Nietzsche, entre otros. Considerado uno de los mayores prosistas del Siglo de Oro y valorado por su didactismo filosófico y moral, sus obras, publicadas en numerosos países y traducidas a diversas lenguas, han sido divulgadas tanto en su vertiente histórica y filológica, como en prácticos manuales de empresa y desarrollo personal. El Héroe, El Político, El Discreto, Oráculo manual y arte de prudencia, Arte de ingenio y la posterior Agudeza y arte de ingenio, El Comulgatorio y, en particular, El Criticón, su obra definitiva, lo han consagrado como modelo de las letras universales, no solo por su escritura aforismática, condensada y polisémica, sino como precursor del existencialismo y el realismo político, sin olvidar cuanto representó desde principios del siglo XX como representante señero del Barroco y de la llamada posmodernidad.
Tapa blanda
190 x 125 mm
144 páginas
8492924667
9788492924660

Baltasar Gracián (1601-1658) se inició en el estudio de las letras europeas a muy temprana edad. Fascinado por materias de ética y teología, ingresó en el noviciado en 1619 para ordenarse sacerdote ocho años después. De ahí en adelante, consagró su vida a la docencia de humanidades y filosofía en distintas instituciones y a la predicación, así como a la redacción de los textos que le procuraron un lugar destacado entre los autores del Siglo de Oro. Sin embargo, estos le reportaron también desavenencias y conflictos con los miembros de su orden, que señalaban con dedo acusador el contenido escasamente doctrinal de sus obras, abordadas desde una perspectiva profana. De este modo, Gracián publicó bajo seudónimo obras tales como El héroe (1637), El político (1640), Arte de ingenio (1642), Tratado de la agudeza (1648), El discreto (1646), Oráculo manual y arte de prudencia (1647) y El Criticón (1651, 1653, 1657), cuya tercera parte determinó la caída en desgracia del autor, condenado a penitencia hasta su muerte. 

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