Diez novelas y un discurso, de Benito Pérez Galdós - Ediciones Cátedra

Aunque la obra de Benito Pérez Galdós es variada y extensa, sus pilares básicos resultan siempre los del humanismo progresista. Por eso, quizás, en la acelerada era presente, la seguridad de su visión de España y el retrato de sus ciudadanos sean la mejor razón para afirmar que sus novelas sirven para iluminar con perenne brillantez esa oscuridad que nos rodea. Hay en ellas un sentido de la propiedad, de la medida, de la decencia, que poco a poco ha ido desapareciendo del dominio público, pero que seguimos necesitando para mantener una convivencia ciudadana con calidad moral. Este volumen que recoge diez novelas y un discurso pretende ofrecer al lector una variedad de tipos de novela, tanto desde el punto de vista temático (novelas ideológicas o de tesis, contemporáneas), como desde el formal (formato tradicional, novela dialogada y la epistolar), que den muestra del talento novelesco de Galdós. La edición corre a cargo de German Gullón y Francisco Estévez. Incluye: Discurso de entrada a la Academia, 'La sociedad presente como materia novelable', y'Doña Perfecta' (1876), 'La desheredada' (1881), 'El amigo Manso' (1882), 'Tormento' (1884), 'La de Bringas' (1884), 'La incógnita' (1889), 'Realidad' (1889), 'Tristana' (1892), 'Nazarín' (1895) y 'Misericordia' (1897).
Tapa blanda
210 x 150 mm
1792 páginas
8437635950
9788437635958

Benito Pérez Galdós (Las Palmas de Gran Canaria, 1843-Madrid, 1920) es uno de los más importantes novelistas del gran realismo europeo del siglo XIX. Aunque sus aprendizajes literarios fueron en el periodismo político y cultural (La Nación, Revista del Movimiento Intelectual de Europa o Revista de España, entre otras publicaciones), desde 1870 inicia una trayectoria de novelista de gran fecundidad y extraordinaria calidad, tanto en el dominio de la novela histórica (los Episodios Nacionales) como en las novelas contemporáneas, marcadas en una primera fase por una práctica muy inteligente de las doctrinas naturalistas –La desheredada (1881), Lo prohibido (1885), Fortunata y Jacinta (1886-87) o Miau (1888)– y en un segundo momento, por el espiritualismo de las novelas rusas, valga como ejemplo su magistral Misericordia (1897). También a partir de la última década del XIX se convirtió en un dramaturgo de referencia en los teatros madrileños y barceloneses. El estreno en enero de 1901 de Electra es un verdadero aldabonazo en plena crisis de entre siglos y dramas como Casandra (1910) o comedias como Celia en los infiernos (1913) son imprescindibles en la Historia del teatro español del siglo XX. 

Otras ediciones de esta obra