Rima 32. Pasaba arrolladora en su hermosura, de Gustavo Adolfo Bécquer | Poema

    Poema en español
    Rima 32. Pasaba arrolladora en su hermosura

    Pasaba arrolladora en su hermosura 
    y el paso le dejé, 
    ni aun a mirarla me volví, y no obstante, 
    algo a mi oído murmuró: 'ésa es'. 

    ¿Quién reunió la tarde a la mañana? 
    Lo ignoro: sólo sé 
    que en una breve noche de verano 
    se unieron los crepúsculos, y... 'fue'. 

    Gustavo Adolfo Bécquer, pseudónimo de Gustavo Claudio Domínguez Bastida, nació en Sevilla en 1836, e ingresó a los diez años en un colegio de huérfanos. Vivió más tarde con su madrina, donde empezó a leer a los autores realistas y románticos. En 1854 se instaló en Madrid. En 1857, sufrió una grave enfermedad. Posteriormente se dedicó al periodismo. Entre 1859 y 1861 escribe las primeras rimas y siete leyendas. En 1863 se recluye en el monasterio de Veruela, donde escribió Cartas desde mi celda. En 1868 Bécquer rompe con su esposa y se instala en Toledo. Reescribe las rimas. En 1870 muere su hermano Valeriano, el pintor, y tres meses más tarde él, en Madrid. Además de como poeta, donde revela una extrema sensibilidad, destaca como prosista, donde combina con maestría lo terrorífico y lo legendario.