Rima 59. Yo sé cuál el objeto, de Gustavo Adolfo Bécquer | Poema

    Poema en español
    Rima 59. Yo sé cuál el objeto

    Yo sé cuál el objeto 
    de tus suspiros es. 
    Yo conozco la causa de tu dulce 
    secreta languidez. 
    ¿Te ríes...? Algún día 
    sabrás, niña, por qué: 
    Tú acaso lo sospechas, 
    y yo lo sé. 

    Yo sé cuando tú sueñas, 
    y lo que en sueños ves. 
    Como en un libro puedo lo que callas 
    en tu frente leer. 
    ¿Te ríes...? Algún día 
    sabrás, niña, por qué. 
    Tú acaso lo sospechas, 
    y yo lo sé. 

    Yo sé por qué sonríes 
    y lloras a la vez: 
    yo penetro en los senos misteriosos 
    de tu alma de mujer. 
    ¿Te ríes...? Algún día 
    sabrás, niña, por qué. 
    Mientras tú sientes mucho y nada sabes, 
    yo que no siento ya, todo lo sé. 

    Gustavo Adolfo Bécquer, pseudónimo de Gustavo Claudio Domínguez Bastida, nació en Sevilla en 1836, e ingresó a los diez años en un colegio de huérfanos. Vivió más tarde con su madrina, donde empezó a leer a los autores realistas y románticos. En 1854 se instaló en Madrid. En 1857, sufrió una grave enfermedad. Posteriormente se dedicó al periodismo. Entre 1859 y 1861 escribe las primeras rimas y siete leyendas. En 1863 se recluye en el monasterio de Veruela, donde escribió Cartas desde mi celda. En 1868 Bécquer rompe con su esposa y se instala en Toledo. Reescribe las rimas. En 1870 muere su hermano Valeriano, el pintor, y tres meses más tarde él, en Madrid. Además de como poeta, donde revela una extrema sensibilidad, destaca como prosista, donde combina con maestría lo terrorífico y lo legendario.