Cohabito con un oscuro animal. Lo que hago de día, de noche me lo come. Lo que hago de noche, de día me lo come. Lo único que no me come es la memoria. Se encarniza en palpar hasta el más chico de mis errores y mis miedos. No lo dejo dormir. Soy su oscuro animal.
en el gran cielo de la poesía/ mejor dicho/ en la tierra o mundo de la poesía que incluye cielos/astros dioses/mortales está cantando el ruiseñor de Keats/ siempre/
Un hombre deseaba violentamente a una mujer, a unas cuantas personas no les parecía bien, un hombre deseaba locamente volar, a unas cuantas personas les parecía mal, un hombre deseaba ardientemente la Revolución y contra la opinión de la gendarmería