Sonreír con la alegre tristeza del olivo. Esperar. No cansarse de esperar la alegría. Sonriamos. Doremos la luz de cada día en esta alegre y triste vanidad del ser vivo.
Desde que el alba quiso ser alba, toda eres madre. Quiso la luna profundamente llena. En tu dolor lunar he visto dos mujeres, y un removido abismo bajo una luz serena. . ¡Qué olor a madreselva desgarrada y hendida!
Beso soy, sombra con sombra. Beso, dolor con dolor, por haberme enamorado, corazón sin corazón, de las cosas, del aliento, sin sombras de la creación. Sed con agua en la distancia, pero sed alrededor. Corazón en una copa
Entre todos vosotros, con Vicente Aleixandre y con Pablo Neruda tomo silla en la tierra: tal vez porque he sentido su corazón cercano cerca de mí, casi rozando el mío.
El mundo es como aparece ante mis cinco sentidos, y ante los tuyos que son las orillas de los míos. El mundo de los demás no es el nuestro: no es el mismo. Lecho del agua que soy, tú, los dos, somos el río donde cuanto más profundo
Eres la noche, esposa: la noche en el instante mayor de su potencia lunar y femenina. Eres la medianoche: la sombra culminante donde culmina el sueño, donde el amor culmina.