Sonreír con la alegre tristeza del olivo, de Miguel Hernández | Poema

    Poema en español
    Sonreír con la alegre tristeza del olivo

    Sonreír con la alegre tristeza del olivo. 
    Esperar. No cansarse de esperar la alegría. 
    Sonriamos. Doremos la luz de cada día 
    en esta alegre y triste vanidad del ser vivo. 

    Me siento cada día más libre y más cautivo 
    en toda esta sonrisa tan clara y tan sombría. 
    Cruzan las tempestades sobre tu boca fría 
    como sobre la mía que aún es un soplo estivo. 

    Una sonrisa se alza sobre el abismo: crece 
    como un abismo trémulo, pero valiente en alas. 
    Una sonrisa eleva calientemente el vuelo. 

    Diurna, firme, arriba, no baja, no anochece. 
    Todo lo desafías, amor: todo lo escalas. 
    Con sonrisa te fuiste de la tierra y del cielo.