Hoy me gusta la vida mucho menos, de César Vallejo | Poema

    Poema en español
    Hoy me gusta la vida mucho menos

    Hoy me gusta la vida mucho menos, 
    pero siempre me gusta vivir: ya lo decía. 
    Casi toqué la parte de mi todo y me contuve 
    con un tiro en la lengua detrás de mi palabra. 

    Hoy me palpo el mentón en retirada 
    y en estos momentáneos pantalones yo me digo: 
    ¡Tanta vida y jamás! 
    ¡Tantos años y siempre mis semanas!... 
    Mis padres enterrados con su piedra 
    y su triste estirón que no ha acabado; 
    de cuerpo entero hermanos, mis hermanos, 
    y, en fin, mi ser parado y en chaleco. 

    Me gusta la vida enormemente 
    pero, desde luego, 
    con mi muerte querida y mi café 
    y viendo los castaños frondosos de París 
    y diciendo: 
    Es un ojo éste, aquél; una frente ésta, aquélla...  
    Y repitiendo: 
    ¡Tanta vida y jamás me falla la tonada! 
    ¡Tantos años y siempre, siempre, siempre! 

    Dije chaleco, dije 
    todo, parte, ansia, dije casi, por no llorar. 
    Que es verdad que sufrí en aquel hospital que queda al lado 
    y está bien y está mal haber mirado 
    de abajo para arriba mi organismo. 

    Me gustará vivir siempre, así fuese de barriga, 
    porque, como iba diciendo y lo repito, 
    ¡tanta vida y jamás! ¡Y tantos años, 
    y siempre, mucho tiempo, siempre, siempre!

    César Vallejo, uno de los poetas hispanoamericanos más destacables del siglo XX, nació en Santiago de Chuco, Perú, en 1892. Estudió medicina, filosofía, derecho y ejerció el magisterio. Constantes en la obra de Vallejo son la solidaridad con el sufrimiento humano, su rebeldía contra la sociedad, la fe en la utopía revolucionaria y la muerte. En 1918 publicó Los heraldos negros, su primer libro de poemas, de influencia modernista. Fue encarcelado en 1920 al ser acusado injustamente de robo e incendio durante una revuelta. En ese tiempo escribió algunos de los poemas que formarían su segundo libro, Trilce. En 1923 se trasladó a Europa. Estuvo en París, en donde conoció a Gris, a Huidobro, fundó la revista Favorables París Poema y terminaría siendo expulsado por razones políticas. En Moscú conoció a Maiakovski. En 1931 se trasladó a España, se afilió al Partido Comunista y publicó Rusia en 1931. Reflexiones al pie del Kremlin y su novela social Tungsteno. Al año siguiente regresó a París, en donde vivió de forma clandestina. Cuando estalló la Guerra Civil española, recogió fondos para la causa republicana y viajó a Madrid y Barcelona para participar en distintos congresos de escritores. Murió en París en 1938. Un año después se publicó su poema más político, España, aparta de mí este cáliz, y una recopilación de su obra poética con el título de Poemas humanos.