Los niños se adormecen en las fuentes las madres se levantan y levantan como ángeles que vuelan en la muerte los sueños se despiertan y se espantan
ya llaman los relojes para el alba la ropa está teñida en sus tendales se levantan las faldas y la enagua pasan los hombres por los ventanales
van las niñas desnudas con los cubos a buscar agua al mar lloran y cantan en sus sueños los dioses van desnudos las niñas se levantan y levantan
en las torres del mar se oyen campanadas en la orilla de sal duermen las algas las niñas se abandonan en la cama en los bosques del cielo están sus nalgas
en las casas oscuras duerme el agua en los pubis de rizado encaje los cuerpos se levantan y levantan en sueños a merced del oleaje
Lo único que tenemos es el cuerpo descendemos o caemos por los pozos del alma y allí están las orillas y la arena, las casas de madera abandonadas, el recuerdo del aro y las canicas, la luz en las paredes de las calles, allí