Ah, mis amigos, habláis de rimas, de Juan Laurentino Ortiz | Poema

    Poema en español
    Ah, mis amigos, habláis de rimas

    ... Ah, mis amigos, habláis de rimas 
    y habláis finamente de los crecimientos libres... 
    en la seda fantástica os dan las hadas de los leños 
    con sus suplicios de tísicas 
    sobresaltadas 
    de alas... 

    Pero habéis pensado 
    que el otro cuerpo de la poesía está también allá, en el Junio 
    de crecida, 
    desnudo casi bajo las agujas del cielo? 

    Qué haríais vosotros, decid, sin ese cuerpo 
    del que el vuestro, si frágil y si herido, vive desde “la división”, 
    despedido del “espíritu”, él, que sostiene oscuramente sus 
    juegos 
    con el pan que él amasa y que debe recibir a veces 
    en un insulto de piedra? 
    Habéis pensado, mis amigos, 
    que es una red de sangre la que os salva del vacío, 
    en el tejido de todos los días, bajo los metales del aire, 
    de esas manos sin nada al fin como las ramas de Junio, 
    a no ser una escritura de vidrio? 

    Oh, yo sé que buscáis desde el principio el secreto de la tierra, 
    y que os arrojáis al fuego, muchas veces, para encontrar el 
    secreto... 
    Y sé que a veces halláis la melodía más difícil 
    que duerme en aquellos que mueren de silencio, 
    corridos por el padre río, ahora, hacia las tiendas del viento... 
    Pero cuidado, mis amigos, con envolveros en la seda de la 
    poesía 
    igual que en un capullo... 
    No olvidéis que la poesía, 
    si la pura sensitiva o la ineludible sensitiva, 
    es asimismo, o acaso sobre todo, la intemperie sin fin, 
    cruzada o crucificada, si queréis, por los llamados sin fin 
    y tendida humildemente, humildemente, para el invento del 
    amor...