Íntima, de Laura Victoria | Poema

    Poema en español
    Íntima

    Fue tan tibia la felpa de las sombras, 
    que sin querer callamos, 
    y nos bebimos como vino añejo 
    la frase que tembló sobre los labios. 
    A pesar de no amarnos, en silencio 
    se troncharon las manos, 
    sin saber si acunábamos un sueño 
    o era el sopor de algún amor lejano. 
    Y también, sin saber por qué  misterio, 
    nuestras bocas ajenas se juntaron, 
    y en las pupilas húmedas de ausencia 
    la tarde lila se quedó temblando. 

    Después, en la maraña del reproche, 
    nos perdimos hablando, 
    y en la roca del alma se hizo sangre 
    la fruta mentirosa de los labios... 

    Tal vez el viento de otras soledades 
    nos sorprenda llorando, 
    y entonces nacerá como eco roto 
    la frase que callamos... 

    • Fue tan tibia la felpa de las sombras, 
      que sin querer callamos, 
      y nos bebimos como vino añejo 
      la frase que tembló sobre los labios. 
      A pesar de no amarnos, en silencio 
      se troncharon las manos, 
      sin saber si acunábamos un sueño