Quiero… sueño, de León Felipe | Poema

    Poema en español
    Quiero… sueño

    No me contéis más cuentos, 
    que vengo de muy lejos 
    y sé todos los cuentos. 
    No me contéis más cuentos. 
    Contad 
    y recontadme este sueño. 
    Romped, 
    rompedme los espejos. 
    Deshacedme los estanques, 
    los lazos, 
    los anillos, 
    los cercos, 
    las redes, 
    las trampas 
    y todos los caminos paralelos. 
    Que no quiero, 
    que no quiero, 
    que no quiero, 
    que no quiero que me arrullen con cuentos, 
    Que no quiero, 
    Que no quiero, 
    Que no quiero, 
    Que no quiero que me sellen la boca y los ojos con cuentos, 
    que no quiero, 
    que no quiero, 
    que no quiero, 
    que no quiero que me entierren con cuentos, 
    que no quiero, 
    que no quiero, 
    que no quiero, 
    que no quiero verme clavado en el tiempo, 
    que no quiero verme en el agua, 
    que no quiero verme en la tierra tampoco, 
    que no quiero, a su ovillo, como un hilo de barba sujeto. 
    Quiero verme en el viento, 
    quiero verme en el viento, 
    quiero verme en el viento, 
    quiero verme en el viento... 
    quiero... ¡quiero!... sueño... ¡sueño! 
    Soy gusano que sueña... y sueño 
    verme un día volando en el viento. 

    • Que venga el poeta. 
      Y me trajisteis aquí para contar las estrellas, 
      para bañarme en el río y para hacer dibujos en la arena. 

      Éste era el contrato. 
      Y ahora me habéis puesto a construir cepos y candados, 
      a cargar un fusil y a escribir en la oficina de un juzgado. 

    • No me contéis más cuentos, 
      que vengo de muy lejos 
      y sé todos los cuentos. 
      No me contéis más cuentos. 
      Contad 
      y recontadme este sueño. 
      Romped, 
      rompedme los espejos. 
      Deshacedme los estanques, 
      los lazos, 
      los anillos, 
      los cercos, 

    • Filosófos, 
      para alumbrarnos, nosotros los poetas 
      quemamos hace tiempo 
      el azúcar de las viejas canciones con un poco de ron. 
      Y aún andamos colgados de la sombra. 
      Oíd, 
      gritan desde la torre sin vanos de la frente: 
      ¿Quién soy yo? 

    • Así es mi vida, 
      piedra, 
      como tú. Como tú, 
      piedra pequeña; 
      como tú, 
      piedra ligera; 
      como tú, 
      canto que ruedas 
      por las calzadas 
      y por las veredas; 
      como tú, 
      guijarro humilde de las carreteras; 
      como tú, 

    • Ahora estoy de regreso, he llegado hace poco, 
      soy nuevo en la ciudad... Y esto quiere decir: 
      Me durmieron con un cuento... 
      y me he despertado con un sueño. 
      Voy a contar mi sueño, narradores de cuentos. 
      Voy a contar mi sueño. 
      Es un sueño sin lazos, 

    • Deshaced ese verso, 
      Quitadle los caireles de la rima, 
      el metro, la cadencia 
      y hasta la idea misma... 
      Aventad las palabras... 
      y si después queda algo todavía, 
      eso 
      será la poesía. 
      ¿Qué 
      importa 
      que la estrella 
      esté remota 

    • Yo no sé muchas cosas, es verdad. 
      Digo tan sólo lo que he visto. 
      Y he visto: 
      que la cuna del hombre la mecen con cuentos, 
      que los gritos de angustia del hombre los ahogan con cuentos, 
      que el llanto del hombre lo taponan con cuentos,