El bien inmueble, de María Eloy-García | Poema

    Poema en español
    El bien inmueble

    la nostalgia vive en el sexto piso 
    tira un papel por la ventana 
    y por un segundo 
    se confunde con el vuelo migratorio 
    de un pájaro que quiere aparearse 
    la mierda que lanza desde su arriba 
    cae sobre la raya en medio 
    de un preso en libertad condicional 
    que no recuerda cómo se iba a su casa 
    aquí el niño que lo ve todo 
    crea en ese momento en la parte izquierda del cerebro 
    un comienzo de neura 
    que asociará a la placidez veinte años más tarde 
    la bondad vive en el tercero 
    tiene una casa confortable pero incómoda 
    el odio tiene siempre un perro en la puerta del cuarto 
    pero la decoración de su casa es impecable 
    la timidez que vive en el quinto 
    ve por la mirilla de su puerta blindada 
    la cabeza distorsionada de un gordo que es el mundo 
    en el noveno vive la veneración 
    la soltera que comparte piso con la envidia 
    el del octavo que es el tiempo 
    se quedó justamente encerrado en el ascensor 
    aquel día que viniste a mi casa 
    y yo soy ese edificio 
    pero nunca subo al décimo 
    la casa de la perfección que es una déspota 
    suelo sin embargo quedarme en el primero 
    del que nunca sé salir 
    allí vive el hastío que nunca pagó la comunidad 
    la memoria 
    que vive en el segundo 
    tiene el síndrome de diógenes 
    todo lo que sube a su casa 
    es digno de ser guardado 
    cualquier tontería tiene la dignidad de un tesoro 
    pero nunca recuerda al que se olvidó de ella 
    ese día subiré al séptimo 
    porque es justo allí donde habita el olvido 

    • estoy pensando en la cajera sedente 
      ella es lo verdadero de la sincronía del mundo 
      con su rayo láser ávido de códigos 
      me murmura complacida las ofertas 
      y cómo suma los dígitos arrastrando 
      entre lo dócil y el hastío 
      el tesoro precioso de mi dulce integral