Los soles canoros, de René Char | Poema

    Poema en español
    Los soles canoros

    La desapariciones inexplicables 
    Los accidentes imprevisibles 
    Los infortunios quizá excesivos 
    Las catástrofes de todo orden 
    Los cataclismos que ahogan y carbonizan 
    El suicidio considerado crimen 
    Los degenerados intratables 
    Los que se enrollan en la cabeza un delantal de herrero 
    Los ingenuos de primera magnitud 
    Los que colocan el féretro de su madre en el fondo de un pozo 
    Los cerebros incultos 
    Los sesos de cuero 
    Los que ivernan en el hospital y conservan la embriaguez de las ropas desgarradas 
    La malva de las prisiones 
    La ortiga de las prisiones 
    La higuera nodriza de ruinas 
    Los silenciosos incurables 
    Los que canalizan la espuma del mundo subterráneo 
    Los enamorados en éxtasis 
    Los poetas excavadores 
    Los que asesinan a los huérfanos tocando el clarín 
    Los magos de la espiga 
    Imperan temperatura benigna alrededor de los sudorosos embalsamados del trabajo. 

    Aldo Pellegrini