Si una luz simboliza la esperanza,
múltiples luces ¿simbolizan
múltiples esperanzas? O acaso
la desesperación
-para aquellos que creen
que sólo hay una necesaria...
El constelado suelo
enciende, apaga, enciende
rutilantes estrellas.
Las dinamos generan nebulosas
de inflamado neón,
asteroides bifásicos,
comentas con su ardiente cabellera
de bombillas fugaces
que cruzan, rayan, trazan
órbitas diminutas,
brillantes trayectorias,
señales de mercurio incandescente
en el turbio apogeo de la tarde.
Muchos son los llamados, mas no es fácil
interpretar los signos.
El dedo
de la Publicidad,
con su crepuscular caligrafía,
aclara muchas cosas,
rotula los espacios, tiñe el aire,
delimita galaxias, difumina
polvo de kilovatios en las calles.
Abierto diariamente hasta las siete:
firmamento caído,
eternidad trizada a vuestro alcance.