A mis amantes todos, y a quienes no han podido serlo completo encerrado en el hielo de un viejo von Stroheim ese dedo carnoso hace girar y girar bajo la sombra de una esfinge de una verga despierta nuestro sueño son armarios que la muerte cierra cabalgamos despojos harapos tiernos braguetas hinchadas soñamos un vampiro moreno vieille Europe Jeune Afrique una agonía en los brazos de nadie o de la sombra una agonía fiel de estrella a estrella en lo infinito carmesí ampolla quizá contenga un árbol y angosto pasadizo del pastor un solo de violín agua o música ordeñan el aire valor ficticio pero amable dice no a quien lo mira enseña su humedad su cartón su doble fondo estoy no estoy contigo en esta jaula detrás de mi cortina soy un muerto sueño húmedos disturbios cortamos el pasar la onda de varios silencios en la ventana florece una cuchilla y tú recuerdas no recuerdas olvidas pájaros olvidas no olvidas miedos de catecismo mares a punto de congelarse nos enseñaron el camino y nos llama el autobús no debemos quedar en tierra ábrete paso al otro lado a tiros
A mis amantes todos, y a quienes no han podido serlo completo encerrado en el hielo de un viejo von Stroheim ese dedo carnoso hace girar y girar bajo la sombra de una esfinge de una verga despierta nuestro sueño son armarios que la muerte cierra
¿Pero es que alguna vez nos hemos visto? Llovían rombos creo sobre el monte más viejo se escuchaban los gritos y los cantos de los coches más rojos y las tardes más leves Cuando en cegueras delicadas frías (pavos de un agua triste o de un cadáver tenso)