Los extraños retratos, de Fina García Marruz | Poema

    Poema en español
    Los extraños retratos

    Ahora que estamos solos, 
    infancia mía, 
    hablemos, 

    olvidando un momento 
    los extraños retratos 
    que nos hicieron. 

    Hablemos de lo que tú y yo, 
    por no tener ya nada, 
    sabemos. 

    Que esta solitaria noche mía 
    no ha tenido la gracia 
    del comienzo, 

    y entré en la danza oscura de mi estirpe 
    como un joven tristísimo 
    en un lienzo. 

    Mi imagen sucesiva no me habita 
    sino como un oscuro 
    remordimiento, 

    sin poder distinguir siquiera 
    qué de mi pan o de mi vino 
    invento. 

    En el oscuro cuarto en que levanto 
    la mano con un gesto 
    polvoriento, 

    donde no puedo entrar, allí me miras 
    con tu traje y tu terco 
    fundamento, 

    y no sé si me llamas o qué quieres 
    en este mutuo, extraño 
    desencuentro. 

    Y a veces me parece que me pides 
    para que yo te saque 
    del silencio, 

    me buscas en los árboles de oro 
    y en el perdido parque 
    del recuerdo, 

    y a veces me parece que te busco 
    a tu tranquila fuerza 
    y tu sombrero, 

    para que tú me enseñes el camino 
    de mi perdido nombre 
    verdadero. 

    De tu estrella distante, aparecida, 
    no quiero más la luz tan triste 
    sino el Cuerpo. 

    Ahonda en mí. Encuéntrame. 
    Y que tu pan sea el día 
    nuestro.