Hombres al natural, de María Sanz | Poema

    Poema en español
    Hombres al natural

    Son seres grises, 
    inequívocamente masculinos, 
    que lo mismo me envían 
    algún ramo de rosas 
    con cuatro plenilunios de retraso, 
    que intentan sorprenderme 
    al llegar en su lata 
    (léase coche) último modelo 
    donde se sienten mágicos. 

    Seres brillantes, 
    portadores de un agua de colonia 
    que anuncia su presencia 
    con cuatro primaveras de adelanto; 
    hombres al natural, de calle y riesgo, 
    que buscan evadirse 
    llevándome a cenar. Puedo ingerirlos 
    antes de que caduquen, 
    pero se me indigestan 
    media hora después, y no merece 
    la pena estropear esa velada. 

    Madre Naturaleza, 
    los pones a mi alcance, y agradezco 
    tus sabias intenciones. 
    Pero yo siempre he sido 
    inequívocamente femenina, 
    y declaro ante ti que cada vez 
    es mayor la distancia que nos une. 

    • Son seres grises, 
      inequívocamente masculinos, 
      que lo mismo me envían 
      algún ramo de rosas 
      con cuatro plenilunios de retraso, 
      que intentan sorprenderme 
      al llegar en su lata 
      (léase coche) último modelo 
      donde se sienten mágicos. 

    • Nadie te ha dado nada, tú lo sabes. 
      Y lo entiendes mejor cada mañana 
      cuando abres tu vacío a los primeros 
      rayos del sol. Entonces agradeces 
      tener por toda herencia tus sentidos 
      para ese instante alado de gorriones 
      que te hace despertar, para ese aroma