Cuando baña mi lecho luz de luna, de Alfred Tennyson | Poema
Poema en español
Cuando baña mi lecho luz de luna
Cuando baña mi lecho luz de luna, bien sé que en el lugar de tu reposo, junto al agua anchurosa de poniente, derrámase una gloria en las murallas:
entre las sombras surge tu mármol reluciente, al deslizarse, lenta, una llama de plata, aclarando las letras de tu nombre, la cifra de tus años.
El místico esplendor flota y se aleja: en mi lecho se apagan las luces de la luna y, cerrando los ojos fatigados, duermo hasta que el crepúsculo se sumerge en sus grises;
y entonces sé que ya la bruma flota, como velo traslúcido, de ribera a ribera, y en el oscuro templo, al modo de un espíritu, centellea tu lápida a la aurora.
La mañana está en calma, sin rumores; en calma, como para ofrecerse a un dolor más tranquilo; y tan sólo, chocando con las hojas marchitas, el fruto del castaño se desliza hasta el suelo.