Moratones y agujetas en un hotel de chinos, de Álvaro Sarró | Poema

    Poema en español
    Moratones y agujetas en un hotel de chinos

    La chica tenía los ojos amarillos.
    Las manos pequeñas.
    Los pies tatuados.
    Y no le gustaba quitarse el sostén.

    Tenía algo increíble en su interior.
    Un talento de la hostia.

    De acuerdo, estaba loca.
    Pero aquel nimio detalle
    potenciaba su encanto
    hasta la bóveda celeste.