Canción, de Gabriel García Márquez | Poema

    Poema en español
    Canción

    Llueve en este poema 
    Eduardo Carranza. 

     
    Llueve. La tarde es una 
    hoja de niebla. Llueve. 

    La tarde está mojada 
    de tu misma tristeza. 
    A veces viene el aire 
    con su canción. A veces… 
    Siento el alma apretada 
    contra tu voz ausente. 

    Llueve. Y estoy pensando 
    en ti. Y estoy soñando. 
    Nadie vendrá esta tarde 
    a mi dolor cerrado. 
    Nadie. Solo tu ausencia 
    que me duele en las horas. 
    Mañana tu presencia regresará en la rosa. 

    Yo pienso —cae la lluvia— 
    nunca como las frutas. 
    Niña como las frutas, 
    grata como una fiesta 
    hoy esta atardeciendo 
    tu nombre en mi poema. 

    A veces viene el agua 
    a mirar la ventana 
    Y tú no estás 
    A veces te presiento cercana. 

    Humildemente vuelve 
    tu despedida triste. 
    Humildemente y todo 
    humilde: los jazmines 
    los rosales del huerto 

    y mi llanto en declive. 
    Oh, corazón ausente: 
    qué grande es ser humilde!

    Gabriel García Márquez (1927- 2014), nacido en Colombia, es una de las figuras más importantes e influyentes de la literatura universal. Ganador del Premio Nobel de Literatura en 1982, fue, además de novelista, cuentista, ensayista, crítico cinematográfico, autor de guiones y, sobre todo, un intelectual comprometido con los grandes problemas de nuestro tiempo, y en primer término con los que afectaban a su amada Colombia y a Hispanoamérica en general. Máxima figura del llamado «realismo mágico», en el que historia e imaginación tejen el tapiz de una literatura viva, que respira por todos sus poros, fue en definitiva el hacedor de uno de los mundos narrativos más densos de significado que ha dado la lengua española en el siglo XX. Entre sus novelas más importantes figuran Cien años de soledad, El coronel no tiene quien le escriba, Relato de un náufrago, Crónica de una muerte anunciada, La mala hora, El general en su laberinto, el libro de relatos Doce cuentos peregrinos, El amor en los tiempos del cólera y Diatriba de amor contra un hombre sentado. En el año 2002 publicó la primera parte de su autobiografía, Vivir para contarla, en 2004 volvió a la ficción con Memorias de mis putas tristes, y en 2012 sus relatos fueron recopilados en Todos los cuentos.