¡Carcajadas y canciones! Los rayos del claro sol Sobre las aguas derraman Su sonriente fulgor: Alegre barca las ondas Mecen con su oscilación; Con mis amigos mejores Sentado en ella voy yo. Choca la barca, deshecha En mil trozos por el mar. Eran malos nadadores Mis amigos, por su mal, Y en las rocas de la patria Se vinieron a estrellar. A mí a los bordes del Sena Me llevó la tempestad. Otra vez los mares cruzo Sobre nueva embarcación: Nuevos amigos contemplo Girar a mi alrededor: De extraños mares me arrulla La melancólica voz. ¡Qué lejos está mi patria! ¡Qué triste mi corazón! ¡Canción nueva, y nuevas risas! Silba el viento con afán: Cruje herido el maderamen, Que bate iracundo el mar. Ya el postrer astro en el cielo Extinguió su claridad. ¡Qué triste que está mi pecho! ¡Qué lejos mi patria está!
En su amor la mariposa Vuela de la fresca rosa Sobre el cáliz perfumado; Un rayo del sol ardiente La baña amorosamente Con su resplandor dorado. Pero ¿a quién ama la rosa? ¿Quién el amor de la hermosa, Quisiera saber, merece?
A orillas del mar desierto, Junto al piélago intranquilo, Un joven lleno de dudas Se detiene pensativo, Y así a las ondas inquietas Dice con aire sombrío: -«Explicadme de la vida El arcano no sabido, Enigma que tantas frentes
Érase un caballero macilento, Trémulo, triste, silencioso y lento, Que vagaba al acaso, con inseguro paso, Siempre en hondos ensueños sumergido, Tan desairado y zurdo y distraído, Que susurraban flores y doncellas Al pasar, vacilante, junto a ellas.
¡Carcajadas y canciones! Los rayos del claro sol Sobre las aguas derraman Su sonriente fulgor: Alegre barca las ondas Mecen con su oscilación; Con mis amigos mejores Sentado en ella voy yo. Choca la barca, deshecha