Tres veces despertar, de Jorge Riechmann | Poema

    Poema en español
    Tres veces despertar



    Por las mañanas, recién despierto, 
    cuando ya una luz pálida de no haber desayunado 
    aventura su inmensa curiosidad en la alcoba 
    y tú eres aún sobre todo 
    ovillo de calor, desnudo imán de sueños, 
    me permito 
    un minuto para adorarte. 





    A veces, al despertar a tu lado 
    estoy seguro de que ciertos «buenos días» 
    podrían curar el cáncer, la ceguera y la lepra. 
    Y deseo entonces desesperadamente 
    ser también yo capaz de saludar así 
    a lo recién creado. 





    Entreabre el alba ventanas en la piel. 

    Yazgo junto a ti. Sé que no conseguiré recordar lo que hemos 
    soñado esta noche. No hay calor comparable al de un cuerpo 
    vivo. 

    Pero el ojo, el ojo desecándose querría... una niebla carmesí, 
    una lluvia de oro, al menos un avivamiento de la noche... 
    querría poder olvidar los poros de sarcástica nitidez 
    que perforan a todos y cada uno de los seres de este mundo. 

    El sol arranca de los cuerpos una música sin cobijo. Duermes, 
    pero asediada por la claridad. Yo ya sé que la prueba de este día 
    consistirá en engolfarse 
    en la estremecida vigilia de la realidad.