Una salva de porvenir, de Roberto Fernández Retamar | Poema

    Poema en español
    Una salva de porvenir

    A Jacqueline y Claude Julien. A Fina y Cintio. 
     
    No hay pruebas. 
    Las pruebas son que no hay pruebas. 
    No estaban, no están, no estarán dadas las condiciones. 
    Creer porque es absurdo, 
    Y creemos. 
    Más absurdo que creer es ser, 
    Y somos. 
    Nada garantiza que fuera menos absurdo 
    No ser ni creer. 
    Las llamadas pruebas yacen por tierra, 
    Húmedas reliquias de la nave. 
    Se derrumbaron las estatuas mientras dormíamos. 
    Eran de piedra, de mármol, de bronce. 
    Eran de ceniza, 
    Y un grito de ánades las hizo huir en bandadas. 

    No guardar tesoros donde 
    La humedad, los bichitos los mordisqueen. 
    No guardar tesoros. 

    El tesoro es no guardarlos. 
    El tesoro es creer. 
    El tesoro es ser. 

    No existen las hazañas ni los horrores del pasado. 
    El presente es más veloz que la lectura de estas mismas 
    palabras. 
    El poeta saluda las cosas por venir 
    Con una salva en la noche oscura. 
    Sólo lo difícil. 
    Sólo lo oscuro. 
    Y contra él, en él, el fuego levantando 
    Su columna viva, dorada, real. 

    El amor es 
    Quien ve.