Farmacia de guardia, de Carmen Martín Gaite | Poema

    Poema en español
    Farmacia de guardia

    No es Valium ni Orfidal, 
    no me ha entendido. 
    Se trata de la fe. Sí: de la fe. 
    Comprendo que es muy tarde 
    y no son horas 
    de andar telefoneando a una 
    farmacia 
    con tales quintaesencias. 
    Lo que yo necesito 
    para entrar confiada en el vientre 
    del sueño 
    es algún específico protector de 
    la fe. 
    ¿Que le ponga un ejemplo más 
    concreto? 
    Pues no sé… Necesito 
    creerme que este saco 
    cerrado por la boca 
    y en cuya superficie 
    se aprecia la joroba 
    de envoltorios estáticos 
    puede volver a abrirse alguna vez 
    a provocar deseos y sorpresas 
    bajo la luz del sol y de la luna, 
    bajo el fervor clemente 
    de los dioses del mar. 
    ¡Oh, volver a sentir lo que era 
    eso! 
    Y ni siquiera necesito tanto 
    'ya es menos lo que pido'; 
    simplemente creerme 
    que un día lo sentí 
    intempestivamente 
    cuando más descuidada andaba 
    de esperarlo, 
    y supe con certeza 
    que sí, que se podía, 
    que un corazón doméstico 
    cuando al fin se desboca 
    es porque está latiendo sin 
    saberlo 
    desde otro muy cercano. 

    Ya. Que no tienen nada. 
    Pues perdone. 
    Comprendo que es muy tarde 
    para hacerle perder a usted el 
    tiempo 
    con tales quintaesencias. 
    Ya me lo figuraba. 
    Buenas noches.