Usted está usted, de Francisco Fernández | Poema

    Poema en español
    Usted está usted

    ¿Está usted loco? 
    Loco está usted, loco, 
    usted está usted, 
    y yo no le digo nada. 
    Quien diga lo contrario loco 
    miente usted, está usted, 
    usted está y yo soy el loco. 
    Para estar hay que creer. 
    ¿Loco? Espere usted. 
    ¿Loco? Un segundo. Primero, 
    ¿loco? ¿está usted? 
    Hay que estar loco 
    para creer que la fantasía 
    no es real. Usted me entiende. 
    Un loco miente. ¿Está usted? 
    Loco hay que estarlo 
    para creer que la realidad 
    es así. No le entiendo a usted. 
    Tiene ojos de usted, de mentir. 
    Quíteselos cuando se refiera a mí. 
    ¿De usted? ¿de quién si no? 
    Del Fermín, del Sancho y del Romeo. 
    Hay que estar Julieta para creerlo. 
    Majareta. Lo que yo digo, está loco. 
    ¿Para dividir? ¿Para separar? 
    ¿Discernir está loco? Locura 
    es poco en invierno, naturaleza sináptica 
    ponía en el informe. Ese loco del imposible 
    nosequé. Esa bata de usted, 
    de cuánto sé y pobre de éste... 
    No lo diga: Porque sueño, yo 
    no lo estoy tanto, ni usted 
    y sus ojos de cuervo encendido, de eslavo sonámbulo 
    pidiendo respeto de amigos invisibles. 
    Hay que estarlo para soñar. 
    Usted no sueña mucho y así va a quedar: 
    miente usted miente usted está usted 
    usted no lee nada y así va a quedar: 
    tapa dura está usted está. Boca blanda. 
    Usted no dice nada y así no me cree. 
    Sí, ya, cree usted que estoy loco, 
    por creer, por soñar; y no lo creo 
    porque no estoy con usted, loco usted. 
    Lo loco su mundo de tiroteo sangrante, 
    lo loco su mundo de dinero caliente, 
    loco loco su mundo de sueño sin dormir, 
    loco loco su mundo de querer estar solos, 
    lo loco su mundo loco de miras cortas; 
    corta las faldas y alargada obscenidad profesa. 
    Locos los sacrificados y los que miran 
    desde abajo, para qué locos los pobres sin derecho 
    a un abogado. Un psicólogo del miedo 
    parece usted. Ya se lo he dicho. 
    Yo soy Tyler. Porque sueña, Léolo está 
    y pasa las noches conmigo y con el gato, 
    el gato que usted dice que no maúlla, 
    ni araña ni se lame el cuerpo y después, 
    pseudocaníbal arrepentido, escupe 
    bolas de cuerpo arrancado y debajo del sofá. 
    Loco está el que embarca con sed. Usted, 
    que está usted y en su derecho a proclamar 
    la verdad y afirmarla como verdad. 
    Loco está usted y loca su firma, 
    loca está la verdad.