Apología y petición, de Jaime Gil de Biedma | Poema

    Poema en español
    Apología y petición

    Y qué decir de nuestra madre España, 
    este país de todos los demonios 
    en donde el mal gobierno, la pobreza 
    no son, sin más, pobreza y mal gobierno 
    sino un estado místico del hombre, 
    ¿la absolución final de nuestra historia? 

    De todas las historias de la Historia 
    sin duda la más triste es la de España, 
    porque termina mal. Como si el hombre 
    harto ya de luchar con sus demonios, 
    decidiese encargarles el gobierno 
    y la administración de su pobreza. 

    Nuestra famosa inmemorial pobreza, 
    cuyo origen se pierde en las historias 
    que dicen que no es culpa del gobierno 
    sino terrible maldición de España, 
    triste precio pagado a los demonios 
    con hambre y con trabajo de sus hombres. 

    A menudo he pensado en esos hombres, 
    a menudo ha pensado en la pobreza 
    de este país de todos los demonios. 
    Y a menudo he pensado en otra historia 
    distinta y menos simple, en otra España 
    en donde sí que importa un mal gobierno. 

    Quiero creer que nuestro mal gobierno 
    es un vulgar negocio de los hombres 
    y no una metafísica, que España 
    debe y puede salir de la pobreza, 
    que es tiempo, aún para cambiar su historia 
    antes que se la llevan los demonios. 

    Porque quiero creer que no hay demonios. 
    Son hombres los que pagan al gobierno, 
    los empresarios de la falsa historia, 
    son hombres quienes han vendido al hombre, 
    los que han convertido a la pobreza 
    y secuestrado la salud de España. 

    Pido que España expulse a esos demonios. 
    Que la pobreza suba hasta el gobierno. 
    Que sea del hombre el dueño de su historia.