Canción del jardinero, de María Elena Walsh | Poema

    Poema en español
    Canción del jardinero

    Mírenme, soy feliz 
    entre las hojas que cantan 
    cuando atraviesa el jardín 
    el viento en monopatín. 

    Cuando voy a dormir, 
    cierro los ojos y sueño 
    con el olor de un país 
    florecido para mí. 

    Yo no soy un bailarín 
    porque me gusta quedarme 
    quieto en la tierra y sentir 
    que mis pies tienen raíz. 

    Una vez estudié 
    en un librito de yuyo 
    cosas que sólo yo sé 
    y que nunca olvidaré. 

    Aprendí que una nuez 
    es arrugada y viejita, 
    pero que puede ofrecer 
    mucha, mucha, mucha miel. 

    Del jardín soy duende fiel: 
    cuando una flor está triste, 
    la pinto con un pincel 
    y le toco el cascabel. 

    Soy guardián y doctor 
    de una pandilla de flores 
    que juegan al dominó 
    y después les da la tos. 

    Por aquí anda Dios 
    con regadera de lluvia 
    o disfrazado de sol 
    asomando a su balcón. 

    Yo no soy un gran señor, 
    pero en mi cielo de tierra 
    cuido el tesoro mejor: 
    mucho, mucho, mucho amor.