Yoruba soy, lloro en yoruba
lucumí.
Como soy un yoruba de Cuba,
quiero que hasta Cuba suba mi llanto yoruba,
que suba el alegre llanto yoruba
que sale de mí.
Olas de gordo aceite son mis días:
pasan tan lentamente que no pasan.
Los hombres a mi lado miran, pasan,
lentos también como mis lentos días.
El futuro está ahí, lleno de días,
pero es un duro charco: por él pasan
lentas sombras de sueños cuando pasan...
Nocturnos cielos cúbrenme los días.
Aprendí, me enseñaron los que pasan
que siempre pasan, pasarán los días,
aunque a veces parezca que no pasan.
Supe además que a bordo de mis días
pasaré yo también con los que pasan,
ceniza en la ceniza de los días.