Llevan una rosa en el pecho los enamorados, de Pere Gimferrer | Poema

    Poema en español
    Llevan una rosa en el pecho los enamorados

    ... Llevan una rosa en el pecho los enamorados y suelen besarse 
        entre un rumor de girasoles y hélices. 

    Hay pétalos de rosa abandonados por el viento en los pasillos 
        de las clínicas. 

    Los escolares hunden sus plumillas entre uña y carne y oprimen 
            suavemente hasta que la sangre empieza a brotar. 
            Algunos aparecen muertos bajo los últimos pupitres. 

    Estaré enamorado hasta la muerte y temblarán mis manos al 
            coger tus manos y temblará mi voz cuando te acerques 
            y te miraré a los ojos como si llorara. 

    Los camareros conocen a estos clientes que piden una ficha 
            en la madrugada y hacen llamadas inútiles, cuelgan 
            luego, piden una ginebra, procuran sonreír, están pensando 
            en su vida. A estas horas la noche es un pájaro azul. 

    Empieza a hacer frío y las muchachas rubias se miran temblando 
            en los escaparates. Un chorrear de estrellas silencioso se 
            extingue. 

    Luces en un cristal espejeante copian el esplendor lóbrego de 
            la primavera, sus sombrías llamaradas azules, sus flores de 
            azufre y de cal viva, el grito de los ánades llamando desde 
            el país de los muertos.