El anteojo, de Concepción Arenal | Poema

    Poema en español
    El anteojo

    Juan y Pedro, una disputa 
    trabaron, estrepitosa, 
    sobre si grande una cosa 
    era, o si era diminuta. 

    La mano en el corazón 
    juraban decir verdad 
    ambos con sinceridad, 
    y uno sólo con razón. 

    Miraban con anteojo 
    estando todo el secreto 
    en que el vidrio del objeto 
    aplicaba Juan a el ojo. 

    «¡Que es muy grande, voto a Cristo! 
    -exclamaba-; miente el culto. 
    No es error, es un insulto 
    negarme lo que yo he visto.» 

    Y no lo hicieran creer 
    aun rompiéndole la crisma, 
    que no es una cosa misma 
    el tener ojos y el ver. 

    Necio que las cosas ves 
    del sabio en contradicción, 
    ¿habrá en tu organización 
    un anteojo al revés? 

    Concepción Arenal (El Ferrol, 1820 - Vigo, 1893). Estudió en Madrid Derecho, Sociología, Historia, Filosofía e idiomas, teniendo incluso que acudir a clase disfrazada de hombre. Colaboró con Fernando de Castro en el Ateneo Artístico y Literario de Señoras, precedente de posteriores iniciativas en pro de la educación de la mujer como medio para alcanzar la igualdad de derechos. Dedicó buena parte de un inagotable activismo social e intelectual al estudio crítico de la realidad penal española. Se sirve de la experiencia acumulada en el desempeño de cargos oficiales de visitadora de cárceles de mujeres de A Coruña (1863) e inspectora de casas de corrección de mujeres (1868-1873) y, sobre todo, de su talento, sensibilidad e intuición para la redacción de obras que la sitúan en un puesto de gran relevancia en estudios penales europeos: Cartas a los delincuentes (1865), Estudios penitenciarios (1877). O visitador do preso (1893) es una de las obras de referencia para el estudio de las ideas centrales de su pensamiento penal. Valiente y adelantada a su tiempo, partidaria de un sistema penal moderno que hiciese posible la corrección del preso, las aspiraciones reformistas de Arenal se materializan con la llegada de la Segunda República.