El libro de horas, de Rainer Maria Rilke | Poema

    Poema en español
    El libro de horas

    Señor, a cada uno dale su muerte, 
    una muerte que de cada vida brote 
    y en que haya amor, significado y sufrimiento. 
    Pues nosotros somos sólo la corteza y la hoja. 
    La muerte que cada uno lleva en sí 
    es la fruta en torno de la cual todo gira. 

    Señor, las grandes ciudades están perdidas y disueltas. 
    En la más grande se vive como quien huye de un incendio. 
    No hay en ella consuelo capaz de consolar 
    y el tiempo demasiado corto cierra el paso. 

    Allí viven seres humanos, con gestos angustiados, 
    vidas malas y difíciles en cuartos profundos... 
    Allí crecen niños en sótanos con ventanas 
    siempre hundidas en las mismas sombras 
    y donde no saben que afuera los llaman las flores 
    a un día lleno de espacio, de júbilo y de viento. 

    Rainer Maria Rilke nació en Praga en diciembre de 1875. Estudió en uno de los mejores colegios de dicha ciudad y luego ingresó en una academia militar, que abandonó para estudiar letras y filosofía en las universidades de Praga, Munich y Berlín. De esa época datan sus primeros libros de poesía: Vida y canciones (1895), Coronado de sueño (1897) y Adviento (1898). Un viaje a Rusia en 1899 le inspiraría años más tarde sus conocidas Elegías del Duino (1922). La leyenda del amor y muerte del alférez Christoph Rilke y el libro Cuadernos de Malte Laurids Brigge atrajeron la atención de los críticos sobre él, especialmente en Francia, donde había residido y había trabado amistad con el escultor Auguste Rodin y el escritor André Gide. Tras la primera guerra mundial, en la que participó brevemente, viajó por varios países mediterráneos y finalmente se estableció en Suiza, donde publicaría los Sonetos a Orfeo, una de sus obras más conocidas. Murió en 1926.