Entonces me besaste, de Raquel Lanseros | Poema

    Poema en español
    Entonces me besaste

    Por celebrar el cuerpo, tan hecho de presente 
    por estirar sus márgenes y unirlos 
    al círculo infinito de la savia 
    nos buscamos a tientas los contornos 
    para fundir la piel deshabitada 
    con el rumor sagrado de la vida. 

    Tú me miras colmado de cuanto forja el goce, 
    volcándome la sangre hacia el origen 
    y las ganas tomadas hasta el fondo. 

    No existe conjunción más verdadera 
    ni mayor claridad en la sustancia 
    de que estamos creados. 

    Esta fusión bendita hecha de entrañas, 
    la arteria permanente de la estirpe. 

    Sólo quien ha besado sabe que es inmortal.