Ajedrez, de Rosario Castellanos | Poema

    Poema en español
    Ajedrez

    Porque éramos amigos y a ratos, nos 
    amábamos; 
    quizá para añadir otro interés 
    a los muchos que ya nos obligaban 
    decidimos jugar juegos de inteligencia. 

    Pusimos un tablero enfrente 
    equitativo en piezas, en valores, 
    en posibilidad de movimientos. 
    Aprendimos las reglas, les juramos respeto 
    y empezó la partida. 

    Henos aquí hace un siglo, sentados, 
    meditando encarnizadamente 
    como dar el zarpazo último que aniquile 
    de modo inapelable y, para siempre, al otro.