En el patio, de Evaristo Carriego | Poema

    Poema en español
    En el patio

    Me gusta verte así, bajo la parra, 
    resguardada del sol del medio día, 
    risueñamente audaz, gentil, bizarra, 
    como una evocación de Andalucía. 

    Con olor a salud en tu belleza, 
    que envuelves en exóticos vestidos, 
    roja de clavelones la cabeza 
    y leyendo novelas de bandidos. 

    — ¡Un carmen andaluz, donde florecen, 
    en los viejos rincones solitarios, 
    los rosales que ocultan y ensombrecen 
    la jaula y el color de tus canarios! — 

    ¡Cuántas veces no creo al acercarme, 
    todo como en un patio de Sevilla, 
    que tus más frescas flores vas a darme, 
    y a ofrecerme después miel con vainilla! 

    O me doy a pensar que he saboreado, 
    mientras se oye una alegre castañuela, 
    un rico arroz con leche, polvoreado 
    de una cálida gloria de canela. 

    ¡Cómo me gusta verte así, graciosa, 
    llena de inquietos, caprichosos mimos, 
    rodeada de macetas, y, golosa, 
    desgranando pictóricos racimos! 

    Y mojarse tus manos delincuentes, 
    al reventar las uvas arrancadas, 
    como en sangre de vidas inocentes 
    a tu voracidad sacrificadas!... 

    Y ver vagar, cruelmente seductora, 
    en esos labios finos y burlones, 
    tu sonrisa de Esfinge, turbadora 
    de mis calladas interrogaciones. 

    Y desear para mí, las exquisitas 
    torturas de tus dedos sonrosados, 
    ¡que oprimen las doradas cabecitas 
    de los dulces racimos degollados!