Ir al contenido principal

Navegación principal

  • Audiolibros en castellano
  • Autores
  • Canales de Youtube
  • +Info

Logo de la web de audiolibros

Audiolibros en castellano

Muchos libros, muchas voces y un poco más.


Géneros

Narrativa
Libro de cuentos
Cuento
Ensayo
Artículo
Poesía
Teatro

Autores

André Breton
Rosalía de Castro
Silvina Ocampo
Luis Cernuda
Ausiàs March
Susana March
Brígido Redondo
Charles Bernstein
Edward Estlin Cummings
Álvaro Valverde
François Villon
Diana Bellessi
Emily Dickinson
Ángel Augier
Raquel Ilombé
Ricardo Güiraldes
Efraín Huerta
Francisco de Quevedo
Charles Baudelaire
Álvaro García López
... Ver todos los autores
  • 1984
    George Orwell
  • El extranjero, de Albert Camus - Editorial Sélector
    El extranjero
    Albert Camus
  • Cumbres borrascosas
    Emily Brontë
  • El viejo y el mar
    Ernest Hemingway
  • La vida de Lazarillo de Tormes, Anónimo
    Lazarillo de Tormes
    Anónimo
  • Frankenstein
    Mary Shelley
  • La resurrección de la rosa
    Rubén Darío
  • El principito
    Antoine de Saint-Exupéry
  • La metamorfosis
    Franz Kafka
  • El cottage de Landor
    Edgar Allan Poe
  • Miss Marple y los 13 problemas, de Agatha Christie - Booket
    Los cuatro sospechosos
    Agatha Christie
  • En este pueblo no hay ladrones
    Gabriel García Márquez
  • El hombre en busca de sentido
    Viktor Emil Frankl
  • El arte de ser feliz
    Arthur Schopenhauer
  • Acerca del alma
    Aristóteles
  • El arte de tener razón
    Arthur Schopenhauer
  • La caída, de Albert Camus - Debolsillo
    La caída
    Albert Camus
  • Un mundo que agoniza, de Miguel Delibes - Plaza & Janés
    Un mundo que agoniza
    Miguel Delibes
  • La vida es sueño
    Pedro Calderón de la Barca
  • Romeo y Julieta
    William Shakespeare
  • La importancia de llamarse Ernesto
    Oscar Wilde
  • El mercader de Venecia
    William Shakespeare
  • El jardín de los cerezos
    Antón Chéjov
  • La dama duende
    Pedro Calderón de la Barca
banner cuadrado de Audible
banner horizontal de Audible

Poemas


  • Responso a Verlaine, de Rubén Darío | Poema

    Rubén Darío

    Padre y maestro mágico, liróforo celeste 

    que al instrumento olímpico y a la siringa agreste 
    diste tu acento encantador; 

    ¡Panida! Pan tú mismo, con coros condujiste 
    hacia el propíleo sacro que amaba tu alma triste, 
    ¡al son del sistro y del tambor! 

  • Nocturno, de Rubén Darío | Poema

    Rubén Darío

    Quiero expresar mi angustia en versos que abolida 
    dirán mi juventud de rosas y de ensueños, 
    y la desfloración amarga de mi vida 
    por un vasto dolor y cuidados pequeños. 

  • Que me perdone la ciencia, de Claudio Martínez Paiva | Poema

    Claudio Martínez Paiva

    Estoy solito en mi rancho, 
    me he quedado solo en casa. 
    Ladran los perros afuera 
    como si vieran fantasmas, 
    y alumbran mis pensamientos 
    candiles de luces malas. 

  • El dulce milagro, de Juana de Ibarbourou | Poema

    Juana de Ibarbourou

    ¿Qué es esto? ¡Prodigio! Mis manos florecen. 
    Rosas, rosas, rosas a mis dedos crecen. 
    Mi amante besóme las manos, y en ellas, 
    ¡oh gracia! brotaron rosas como estrellas. 

  • Poema para el limpiabotas, de Charles Bukowski | Poema

    Charles Bukowski

    Equilibrio es el que mantienen los caracoles que trepan 
    por los acantilados de Santa Mónica; 
    Suerte es bajar andando la Western Avenue 
    y que las chicas de una sala de masajes 
    te griten, 'Hola cariño'. 

  • Primera velada, de Arthur Rimbaud | Poema

    Arthur Rimbaud

    Desnuda, casi desnuda; 
    y los árboles cotillas 
    a la ventana arrimaban, 
    pícaros, su fronda pícara. 

    Asentada en mi sillón, 
    desnuda, juntó las manos. 
    Y en el suelo, trepidaban, 
    de gusto, sus pies, tan parvos. 

  • ¡Cuídate, España, de tu propia España!, de César Vallejo | Poema

    César Vallejo

    ¡Cuídate, España, de tu propia España! 
    ¡Cuídate de la hoz sin el martillo, 
    cuídate del martillo sin la hoz! 
    ¡Cuídate de la víctima a pesar suyo, 
    del verdugo a pesar suyo 
    y del indiferente a pesar suyo! 
    ¡Cuídate del que, antes de que cante el gallo, 

  • He aquí el amor, de Jorge Eduardo Eielson | Poema

    ' He aquí el amor. 
    Repito: 
    He aquí el amor. 

  • Carpe diem, de Horacio | Poema

    Horacio

    No pretendas saber, pues no está permitido, 
    el fin que a ti y a mi, Leucónoe, 
    nos tienen asignados los dioses, 
    ni consultes los números Babilónicos. 
    Mejor será aceptar lo que venga, 
    ya sean muchos los inviernos que Júpiter 

  • El lobo murmurador, de Concepción Arenal | Poema

    Concepción Arenal

    Entre las breñas de un cerro 
    un día de gran nevada, 
    un lobo a su camarada 
    hablábale así de un perro: 

    «Es un maldito vecino, 
    tan camorrista y cruel 
    que, para estar libre de él, 
    ya se necesita tino. 

  • Poema 450. Bueno es soñar. Despertar es mejor, de Emily Dickinson | Poema

    Emily Dickinson

    Bueno es soñar. Despertar es mejor 
    si se despierta en la mañana. 
    Si despertamos a la media noche, 
    es mejor soñar con el alba. 
    Más dulce el figurado petirrojo 
    que nunca alegró el árbol, 
    que enfrentarse a la solidez de un alba 

  • Balada del tiempo perdido, de María Elena Walsh | Poema

    María Elena Walsh

    'Yo dormía pero mi corazón velaba...' 
    Cantares 

     
    Como a sus vanas hojas 
    el tiempo me perdía. 
    Clavada a la madera de otro sueño 
    volaban sobre mí noches y días. 

  • Cargar más